Los apegos son conductas nocivas que
desarrolla el ser humano que pueden afectar la parte emocional de la persona. Cuando
no se trabajan desde la niñez pueden generar en la juventud y madurez comportamientos dañinos para la persona y para su pareja. El
niñ@ manifiesta ciertos patrones de inseguridad
cuando no encuentra respuesta asertiva de sus padres ante sus necesidades
o haya demasiada protección (sub protección) que le hace vulnerable a medida
que crece desarrollando inconscientemente
miedos y desconfianza a estar solo en la vida.
Esto también afecta su poder de
decisión se vuelven inseguro, por lo cual es bueno desde la niñez que los
padres trabajen esta área en sus hijos enseñándoles a tomar sus decisiones con
supervisión de ellos, entregándoles ciertas responsabilidades acorde a su edad
y orientándolos hacia la independencia, sin llegar a extremos, para que cuando
sean adultos puedan asumir ciertas situaciones de la vida sin temor a enfrentarlas (una separación, un viaje, una
enfermedad, etc.); El peligro es que cuando estos niños crecen y entran en la
etapa de la juventud y madurez terminan manifestando estos comportamientos en
sus relaciones de pareja. Por lo general
los apegos son producidos por un temor a ser abandonado.
La persona no es que
realmente este enamorada del otro (aunque puede estarlo) o dependa del otro sino que está mostrando
su miedo a la soledad, miedo a no
sentirse valorada, son dependientes de
la aceptación de su pareja.
Actúan de manera contradictoria, aun en el sexo, no
se sienten seguras y pueden manifestar
celos hacia otras personas y pensar que son mejores, Manejan ansiedad y Viven
pendiente a un aviso telefónico y
constantemente necesitan escuchar que son amadas, el no verlo puedes hacerles
pensar que su pareja ya no siente un interés hacia ellas y ha dejado de
quererlas. Otra cosa es que estas personas que manifiestan apegos convulsivos (hombres
como mujeres) se vuelven posesivos controlan el tiempo y amistades de la
persona pero también buscan intervenir en sus agendas. Los apegos suelen
despertar en las personas con este mal un sentido que he llamado, laceración,
es decir permanecer en relaciones tormentosas y dañinas con tal que el otr@ no
se aleje de ellas provocando a su entorno hogareño un ambiente de desconfianza
e inseguridad terminando en círculo vicioso.
El ambiente en que se mueve la
persona influye también en que sus apegos se den con mayor intensidad sobre
todo cuando sus amistades son personas inseguras con los mismos síntomas y relaciones de pareja similares.
Los apegos fácilmente pueden conducir a la
manipulación, la persona dominada por ellos inconscientemente utiliza mecanismos que buscan llamar la atención y
está comprobado que aún puede llegar afectar su desempeño laboral. La
manipulación puede llegar a usar la amenaza y el terror como mecanismo de
control, (suicidio, me voy donde nadie sepa de mí, no voy a volver a bañarme,
etc).
Que Dios nos ayude
¿Sientes que eres una persona con alto
grado de dependencia de tu pareja?
¿Dependes de tu pareja para todo?
¿Podría vivir sin ella?
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